Ante la adusta mirada del Libertador que engalana el salón de protocolo que lleva su nombre en la sede de la Cancillería, 59 estudiantes procedentes de Asia se tomaron la noche bogotana.
Muchos de ellos llegaron engalanados con sus trajes típicos y poco a poco el Salón Bolívar se fue llenando de una polifonía de voces y sonidos que dejaban entrever la riqueza cultural que existe en cada uno de estos países que cada vez son más cercanos a nuestros intereses.
Algunos de los 59 estudiantes que llegaron a Colombia a aprender español en 8 de nuestras universidades de más alto nivel y en 4 ciudades diferentes, tenían algunas bases de pronunciación de nuestro idioma. Otros no. Maya, una esbelta japonesa contaba que en su país aprendió a hablar español con una profesora colombiana quien a su vez le recomendaba que para aprender bien nuestro idioma lo hiciera en Guatemala, Costa Rica o Colombia. Y así lo hizo. Guatemala y Costa Rica formaron parte de su itinerario y atención para aprender nuestra lengua pero algo le quedaba faltando. No lo entendía. No sabía en qué consistía ese vacío que le atormentaba. Estaba estudiando lo que más le gustaba pero no la llenaba. Al regresar a Japón fue en busca de su profesora y cuando le contaba de su experiencia entendió a la perfección del porqué de su vacío: Ni en Guatemala ni en Costa Rica el español era tan melodioso como el que pronunciaba su maestra. Eso la decidió a venir a Colombia y será una de las alumnas más atentas que tendrá la Universidad de La Sabana en los próximos cuatro meses.
Y seguramente así pueden ser muchas de las historias de vida que llegaron de Australia, Camboya, China, Corea, Filipinas, Indonesia, Japón, Laos, Malasia, Myanmar, Singapur, Tailandia y Vietnam con el deseo de conocer y aprender el mejor español del mundo en esa alianza que han integrado la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional, APC – Colombia, el ICETEX, el Instituto Caro y Cuervo y las universidades Pontificia Bolivariana y EAFIT de Medellín; Sabana, Nacional de Colombia sede Bogotá, Los Andes y Pedagógica Nacional en Bogotá; la de Caldas en Manizales y la Autónoma de Bucaramanga.
Patty Londoño, la viceministra de Relaciones Exteriores expresó la felicidad, alborozo y expectativas que tienen todos los integrantes de la alianza en esas cálidas palabras que pronunció en la bienvenida que se les brindó a los estudiantes asiáticos. De la misma manera lo expresado por José Luis Acosta, director del Instituto Caro y Cuervo quien además les dio el primer regalo a los agasajados: libros del Caro y Cuervo para que vayan aprendiendo la forma y el ritmo con que se escribe el mejor español del mundo.
El lunes 26 a partir de las 8:00 de la mañana iniciarán su recorrido por los vericuetos de nuestro idioma y en cuatro meses nos volveremos a encontrar y seguramente aplaudiremos sus avances en el manejo del idioma que pondrán en práctica al regresar a sus países de origen asumiendo de nuevo sus roles como guías turísticos y culturales.
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