María José Arjona
“La gran belleza del performance es la flexibilidad infinita que tiene. Es un camino en el que hay que explorar sus propias fórmulas, para que sea capaz de traducir conceptualmente algo que nos es tan físico, ni tan corpóreo”
Me interesa el concepto del cuerpo en relación con el tiempo. He dedicado toda mi práctica artística al performance de larga duración. Es un camino en el que hay que explorar sus propias fórmulas y su propia manera de hacer, para que sea capaz de traducir conceptualmente algo que nos es tan físico, algo que no es tan corpóreo. El cuerpo solamente puede hacer ciertas cosas en la medida que haya un rigor.
Para hacer un buen performance uno tiene que saber escribir, saber investigar, se debe saber amarrar una cantidad de cosas al tiempo. El tiempo para mí es como el gran reto del performance. Hay cosas que me parece que pueden ser interesantes como el shock, las suspensiones, pero nunca, esto da realmente, la dimensión y la medida de lo que uno enfrenta en la vida, y es el tiempo el que hace que uno se mueva de una manera específica.
Luego de más de tres horas, hay algo que comienza a suceder porque el espectador entra en esta gran franja del tiempo donde está pasando una sola cosa, porque por lo general hay una serie de repeticiones. Es el tiempo en el que el espectador entra en el trabajo y en el que todo cambia. Para mí ha sido como un gran encuentro, como cuando entra un cuerpo al espacio, el espacio no vuelve a ser el mismo y nada es lo mismo.
Puede que yo tenga presupuestada una idea muy clara de ciertas cosas que necesitan suceder para que conceptualmente la pieza se mueva de cierta manera, pero apenas entra el espectador o hay una interacción, pues hay miles de variantes y en esa instancia, el cuerpo del performance está confrontado con otra corporeidad y con otra temporalidad.
Todos manejamos distintos lenguajes y códigos y eso también lo he podido entender en la medida en que viajo. Ciertos movimientos tienen una serie de respuestas en algunos lugares y en otros no. Esto también me interesa, esa confrontación con el otro que es distinto a mí, pero gracias a esa diferencia tengo que hacerme a otra corporeidad, para realmente entender de qué estamos hablando.
Lo que me ha interesado del performance es precisamente esa posibilidad de investigar. Me interesa la biología, las matemáticas, la cocina, los pájaros, todo lo que tenga que ver con topografía y la literatura. De hecho el inicio de cualquier investigación que realizo, por lo menos los siete primeros meses, es escrita, no hay dibujos, no hay nada.
Conozca más del proyecto
Los 'Rostros de la Cultura Colombia' presenta una muestra del trabajo y la pasión de millones de compatriotas que aman, viven y hacen cultura en todas las regiones del país.