Provenientes de regiones como la Costa Atlántica y Pacífica, Centro del país, Llanos Orientales, Santanderes, Caquetá y personas que están en Bogotá pero
se desplazan en forma habitual a las regiones, el representativo grupo
de promotores de lectura tuvo la oportunidad de aprender a manejar
nuevas herramientas teóricas y prácticas para desarrollar sus labores en
300 bibliotecas públicas que hacen parte de la red a lo largo y ancho
del país, 260 de las cuales vienen a sumarse al programa.
Sin embrago, el programa tendrá una
cobertura mucho más amplia de lo que podría parecer a primera vista
puesto que, de acuerdo con la Coordinadora de la estrategia de Promotores de lectura, Marcela Labrador,
la idea es que gracias a la actual estrategia de tutores
departamentales y la de promotores de lectura regionales se pueda
alcanzar una cobertura que abarque todo el país. ''Más que una serie de
talleres, se trata de escuchar la voz de los promotores en materia de
formación de bibliotecarios, de tal manera que se pueda adelantar un
proyecto de carácter permanente que se pueda desarrollar a lo largo de
todo el año'', puntualiza.
''La idea es que cada promotor visite al
menos 10 bibliotecas públicas, en las que de manera conjunta con los
bibliotecarios vamos a desarrollar proyectos de promoción de lectura
enfocados hacia la Lectura en Voz Alta”, precisa Aura María Torres,
abogada y promotora de lectura con una experiencia de cerca de seis
años, y quien en la actualidad hace parte del nodo Norte, departamentos
de Córdoba, Sucre y Bolívar.
Con ese objetivo, un equipo interdisciplinario del Ministerio de Cultura, integrado entre otros por el coordinador del Grupo de Literatura y Libro, Nahum Montt, la Coordinadora de programas de lectura de la Biblioteca Nacional de Colombia, Graciela Prieto,
así como por expertos en el uso de plataformas de carácter estratégico
como Maguaré, Magua-red y la Llave del saber, los puso al corriente de
los avances que hay en la materia.
''Mientras que algunos talleres tienen
un carácter magistral y otros son más prácticos, se pensó en adelantar
una capacitación especial del programa La llave del saber, así como unas
sesiones de Lectura en Voz Alta'', explica la
funcionaria, para quien gracias a que la mayoría de los promotores tiene
experiencia en el trabajo en región, se espera que den a conocer los
lineamientos del Plan Nacional de Lectura y Bibliotecas junto con el nuevo proyecto de Lectura en Voz Alta
a las bibliotecas que hacen parte de la red, además de capacitarse para
generar procesos de formación con los bibliotecarios y realizar una
selección conjunta del material con el que se va a trabajar a lo largo
del año.
De acuerdo con Graciela Prieto,
esta selección se hará a partir de las múltiples colecciones de
literatura infantil y juvenil que han sido entregadas a las 1.404
bibliotecas públicas como parte de la estrategia del Plan Nacional de Lectura y Escritura Leer es mi Cuento.
“Dentro de todo ese acervo se escogerán aquellos que resulten más
adecuados para la lectura en voz alta”, explica la funcionaria
destacando la importancia de que sean libros en los que prime el texto
sobre la imagen y además sean susceptibles de ser compartidos a través
del ejercicio de la lectura.
Promotores de lectura
Profesionales con formación en Ciencias
Sociales y Ciencias Humanas así como en Artes –cuyo número no es tan
representativo-, la gran mayoría de promotores de lectura que hacen
parte del programa cuentan con una amplia trayectoria que data de
proyectos tan destacados como la Red Nacional de Escritura Creativa (RELATA), Retomo la Palabra o el Concurso Nacional de Cuento, se han desempeñado como pasantes de la Red Nacional de Bibliotecas Públicas y cuentan con una amplia formación por parte del Centro Regional para el Fomento del Libro en América Latina y el Caribe (CERLAC).
''Lo importe de la estrategia de este
año es tener la posibilidad de acompañar a los bibliotecarios en la
movilización de todas estas colecciones que han venido llegando a lo
largo de los últimos años a las bibliotecas de los diferentes
municipios, con el fin de adelantar estos ejercicios de Lectura en Voz Alta'', comenta Alexander Carreño, filósofo quien cuenta con una experiencia de más de nueve años y se desempeña como promotor en del nodo Pacífico, con énfasis en el departamento del Cauca.
Con una formación similar, a la que se
suma el haberse desempeñado en la coordinación de regiones en programas
similares, los coordinadores de nodo son los encargados de programar las
rutas y diseñar los formatos que se requieren para adelantar las
visitas, junto a la posterior seguimiento y evaluación de la estrategia,
así como la programación de reuniones de carácter mensual junto con los
promotores que hacen parte de cada nodo.
''El principal objetivo es que las
bibliotecas sean reconocidas en las comunidades donde funcionan y sean
entendidas como espacios con capacidad de atender las necesidades de
todo tipo de público en cada municipio, en procura de cambiar los
imaginarios que existen respecto a su uso y esa idea respecto a que la
biblioteca necesariamente debe estar atada a una época de formación en
la escuela, el colegio o la universidad'', acota Prieto quien es vehemente en subrayar el hecho de que la biblioteca debe ser entendida como un espacio para todos.
Buena parte de las metas que se ha trazado el Plan Nacional de Lectura y Escritura Leer es mi Cuento,
están encaminadas no solo en que la biblioteca sea un lugar con una
infraestructura propia y que funcione en condiciones dignas, sino que
además cuente con bibliotecarios bien formados, en capacidad de hacer
uso de unas colecciones bibliográficas que son actualizadas en forma
constante.
''Este año la estrategia se ha enfocado
en que nosotros no solo acompañemos los procesos de las bibliotecas, no
solo con los bibliotecarios sino con las comunidades que habitan estos
espacios para poder llegar a esas otras personas que viven en el
municipio, conozcan su biblioteca y comiencen a tener una relación mucho
más estrecha con esos libros que la integran, así como con el resto de
servicios que se ofrecen y entiendan que la biblioteca también es de
ellos'', comenta a su turno Gabriela Tique Márquez, licenciada en español y quien tras realizar un intenso trabajo en el departamento de Nariño, ahora hace parte del nodo Pacífico.
Condiciones esenciales a las que deberá
sumarse una mayor tarea de promoción y divulgación en procura de lograr
una verdadera apropiación de estos espacios por parte de la comunidad,
en procura de hacer que los libros circulen y en realidad se lean.
''Las bibliotecas deben ser espacios de
encuentro alrededor de la palabra, y en ese sentido la lectura en voz
alta se hace prioritaria, en el hecho de poder reencontrase y
reconocerse en el otro a través de la lectura, para poder acercarlo
también a través de un permanente intercambio de las colecciones con
las que se han venido dotando las bibliotecas gracias a la labor del Ministerio de Cultura'', destaca Jhon Freddy Galindo Córdoba, licenciado en Español y Literatura, y quien cuenta con más de 10 años de experiencia en el campo de promoción de la lectura.
Un ejemplo de lo que ya ocurre para
hacer realidad estas metas son por ejemplo los denominados actores
estratégicos, personas de la comunidad quienes pasan buena parte de su
tiempo en la biblioteca y son de los aliados estratégicos más
importantes con que cuenta el programa, en la medida que es gracias a la
biblioteca que se potencia una vocación de servicio a la comunidad, que
de otra forma se perdería y con quienes se viene trabajando de una
manera mucho más estrecha y constante.
''Independientemente de que se cuente
con una franja para que el bibliotecario lea a un grupo determinado de
usuarios, lo que buscamos es también que cada vez que una persona lo
requiera se realice este tipo de actividad en cualquier momento del
día'', agrega Prieto.
''Aparte de sugerir nuestras propias lecturas, este ejercicio de Lectura en Voz Alta
también se va a desarrollar a partir de lo que le gusta leer al
bibliotecario y a los usuarios de la biblioteca: tenerlos en cuenta como
sujetos activos que hacen parte fundamental de la vida de cualquier
biblioteca'', afirma Gabriela, a quien Jhon Freddy
complementa resaltando la importancia de tener muy en cuenta la enorme
diversidad cultural de un país como Colombia. ''Sabemos que cada región
tiene un contexto distinto y a eso vamos''.
Juan Carlos Millán Guzmán
Grupo de Divulgación y Prensa,
Ministerio de Cultura
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