Además de rebajar la carga tributaria,
la norma está formalizando la industria y haciendo de Colombia un destino
codiciado para espectáculos de gran formato.
Así las
cosas, Estéreo Picnic, al que se calcula llegarán aproximadamente 45 mil
personas, podrá competir con festivales como Lollapalooza en Chile o Rock en
Río. Bogotá –y también Medellín– comienzan a consolidarse como destinos
predilectos para los grandes productores de espectáculos en Latinoamérica.
La Ley de
Espectáculos es un hito para los productores de festivales musicales como
Estéreo Picnic. Ya que la mayoría de las bandas invitadas son extranjeras (más
de 35), como Pixies, Nine Inch Nails y Red Hot Chili Peppers, los contratos
firmados tuvieron un incentivo tributario muy significativo: vieron reducida su
retención en la fuente del 33% al 8%.
Según
Juan Camilo Silva, uno de los productores de Estéreo Picnic, esta reducción
“facilita que los promotores operen de manera 100% legal porque baja los
costos. Antes eso era inviable porque los artistas no se dejaban retener ese
dinero de sus honorarios y la legalización se volvía un sobrecosto para el
promotor. Ahora es más fácil venderle al artista la idea de que se le va a
retener sólo el 8%. Este es un proceso que hemos venido haciendo desde que
salió la Ley de Espectáculos”.
Adicionalmente,
los servicios artísticos donde prima la creatividad están excluidos del pago de
IVA. Estos se refieren a la dirección artística, la composición y ejecución de
obras, la realización de diseños y planos técnicos con los requisitos de
iluminación y sonido, la elaboración de libretos y guiones, el diseño y elaboración
de vestuario, zapatería, maquillaje y tocados de las artes representativas y,
por último, al diseño, creación y construcción de escenarios, tarimas, y
equipos de iluminación, sonido y audiovisuales. Esta exención del pago del IVA
no aplica para televisión y cine, ya que la Ley de Espectáculos únicamente se
refiere a las artes escénicas.
Dada la
magnitud del evento, la reducción en estos costos es evidente en la calidad de
las producciones y en la presencia de bandas cada vez más prestigiosas. “Nunca
se ha hecho un evento así en Colombia. Jamás. Se cuidaron los detalles al
máximo y a todo nivel. Desde los camerinos, la tarima, los equipos, los pisos,
las carpas… todo. Y todo con un estándar de primerísimo nivel que nunca
habíamos tenido aquí”, dijo este miércoles Sergio Pabón, uno de los productores
del evento, en una entrevista para Vice.
Otro de
los aspectos fundamentales de la Ley de Espectáculos es que permite al
Ministerio de Cultura recaudar el 10% de todas las boletas mayores a $82.455
para luego reinvertir este dinero en los escenarios públicos y privados de
Bogotá. Estéreo Picnic es uno de los mayores contribuyentes de estos recursos.
Desde la puesta en marcha de la Ley de Espectáculos, este gigante ha aportado
aproximadamente 500 millones de pesos que están siendo destinados a construir,
mejorar y dotar escenarios artísticos de la capital.
Estos
dineros, que provienen de un porcentaje de la boletería, comienzan a ser
visibles en escenarios como el Teatro Libre de Chapinero, el Teatro La
Candelaria, el Centro Integral de Artes Teatridanza, la Casa del Teatro
Nacional, el Teatro Tecal, el Teatro Hilos Mágicos, el Teatrino Don Eloy, el
Teatro Ditirambo, el Tea Tropical, y el Teatro El Contrabajo.
“Dado el crecimiento del festival, para esta versión el Ministerio de
Cultura proyecta un aumento significativo en el recaudo, presumiblemente
superior al 50%, con respecto a 2013, una buena noticia para la
infraestructura de las artes escénicas de Bogotá”, señaló Adriana Hurtado, coordinadora
del área de Ley de Espectáculos de la cartera de Cultura.
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