En el primero de los casos el jurado decidió premiar el relato titulado “Vecinos”, autoría de Harold Kremer Martínez, quien recibió un estímulo de tres millones quinientos mil pesos tras haberse postulado en calidad de director del taller realizado en la Biblioteca de la Universidad Santiago de Cali.
Respecto a la categoría de mejor asistente a taller los galardonados fueron: Carolina Eugenia Rojas Vélez, de la Biblioteca Pública Piloto de Medellín, a quien se reconoció como la autora del mejor cuento gracias a la obra “Las palabras hacen falta, sabes”, y quien recibirá un premio de tres millones de pesos.
De igual manera, el cuento escrito por Daniel Mauricio Montoya Álvarez bajo el título de “Los zapatos azules”, que a juicio del jurado ocupó el segundo lugar y recibió un estímulo de dos millones de pesos, gracias a la labor adelantada en los talleres de la Biblioteca Pública Piloto de Medellín y el taller “Libertura” de la ciudad de Ibagué, respectivamente.
Integrado por la poetisa Olga Lucía Estrada Zapata, el escritor Antonio Joaquín García Ángel y el profesor universitario Fabio Jurado Valencia, el jurado decidió declarar desierto el premio para mejor poesía para las categorías de director y asistente de taller respectivamente, de manera unánime.
En tal sentido, Los jurados explicaron que su decisión se debió al bajo nivel de participación, además de hacer un llamado de atención, puesto que en su concepto “la poesía debe tener exigencia, no debe ser tomada con ligereza y sin rigor”.
“Del mismo modo”, agregaron “exhortamos al tratamiento del lenguaje y de la imagen, al trabajo disciplinado y con consistencia en la necesidad de no recurrir a lugares comunes o estar meramente apoyados en las referencias literarias.”