El sector cultura cuenta con más de veinte fuentes de financiación, las cuales representan, solo con destinación específica, más de 1 billón de pesos anuales para inversión en el sector.
Respecto a los recursos con destinación específica, en el Ministerio de Cultura se apropian parte de los recursos recaudados por el 4% de Impuesto Nacional del Consumo de la telefonía móvil celular.
Cada vez que una persona en Colombia realiza una llamada por celular, paga el 16% de IVA y el 4% de impuesto al consumo. El impuesto al consumo se destina para el fortalecimiento del deporte y de la cultura y se transfiere directamente a los departamentos; y el 10%, de ese 4%, se ejecuta por el Ministerio y se destina exclusivamente a la financiación y fortalecimiento de las bibliotecas públicas y de los procesos de lectura. Esto representa una cifra superior a los $20 mil millones anuales.
Este año MinCultura, realizó la distribución de $27.841.360.335 a los 32 Departamentos y el Distrito Capital de los recursos del Impuesto Nacional al Consumo a la Telefonía Móvil para el fomento, promoción y desarrollo de la cultura y la actividad artística colombiana. Por otro lado, durante los últimos cuatro años y gracias a la gestión del Ministerio, se han reintegrado por parte de los Departamentos y Distrito Capital recursos por $ 47.127 millones, no ejecutados dentro de los plazos establecidos por Ley, a partir del estricto seguimiento que hoy se hace a las regiones. Estos recursos han sido reinvertidos en acciones de apropiación social del patrimonio cultural.
Reforma Tributaria beneficia al sector
A través de la Reforma Tributaria que tramita el Gobierno Nacional ante el Congreso, el Impuesto Nacional al Consumo a la telefonía móvil (INC) ampliará su base gravable a los servicios de datos y navegación móvil, para dar cumplimiento a la actual Ley 1607 de 2012, donde se estableció en el Artículo 512-2, que “el servicio de telefonía móvil estará gravado con la tarifa del cuatro por ciento (4%) sobre la totalidad del servicio, sin incluir el impuesto sobre las ventas”. Si se aprueba este punto de la Reforma Tributaria, se podrían hasta duplicar los recursos para la Cultura y el Deporte que por este concepto le llegan al sector a través del Ministerio de Cultura, los departamentos y los municipios del país.
Leyes estructurantes
Gracias a la Ley de cine 814 de 2003, se creó una contribución parafiscal que lo pagan quienes compran una boleta para ir a cine y que ha permitido crear estímulos a los que acceden por concurso: guionistas, directores, realizadores y el sector en diversas modalidades. Gracias a ella entre 2010 y 2016, un total de 474 proyectos han sido beneficiados por el Fondo para el Desarrollo Cinematográfico, FDC.
Con la Ley 1556 (Ley filmación Colombia, promulgada en 2012) el Gobierno, promueve a Colombia como el mejor escenario para el rodaje de películas y contempla devoluciones en dinero a aquellos productores que inviertan en el país en el campo del cine; 40% para inversiones directas en cinematografía ya sea en pre producción, producción o post producción, y 20% inversiones en gastos logísticos. A 2016 esta ley ha acobijado 26 proyectos extranjeros aprobados con una inversión de $113 mil millones, de la cual el Gobierno Nacional ha aportado $39 mil millones como contraprestación.
Ley 1493 de 2011 o Ley de Espectáculos Públicos crea la contribución parafiscal cultural a la boletería de los espectáculos públicos de las artes escénicas, que corresponde al 10 % del valor de la boletería y derechos de asistencia con precio igual o superior a 3 UVT. En 2016 la Ley del Espectáculo Público generó un recaudo de más de $16.300 millones y desde 2012 a 2016 se ha recaudado más de $ 72.900 millones. Este mismo año se realizaron giros a las Alcaldías Municipales por más de $19.900 millones y desde 2012 a 2016 por más de $65.000 millones. Se han beneficiado 91 escenarios de las artes escénicas: 60 privados, 30 públicos y 1 Mixto.
No obstante lo anterior, el sector no ha sido ajeno a la afectación generada en el Presupuesto Nacional producto de la reducción de ingresos, hasta el año 2015 el presupuesto del Ministerio presentó un crecimiento constante respecto al año anterior, pero para la vigencia 2016 se evidencia una reducción del 14.3% respecto al presupuesto 2015.
Crecimiento del presupuesto
El presupuesto del Ministerio de Cultura creció en estos seis años como nunca antes. Ha tenido un incremento de un 164% en inversión en este Gobierno; el total del presupuesto de los años 2005 al 2010, fue de $860.721 millones y de estos, para inversión se contó con $365.757. Entre el 2011 y el 2016, fue de $1.982.842 millones, de los cuales, $965.679 millones fueron para inversión. Antes era impensable lograr un presupuesto así para la cultura.
Adicionalmente, el sector contó con recursos de cooperación que para la vigencia 2016, mediante el convenio de Cooperación entre el Gobierno y la Embajada del Japón se invirtieron un total de $2.189.824.741, para la construcción de cinco bibliotecas más en Santa Catalina y Margarita, Bolívar; Chibolo, en Magdalena, así como en Chima y Purísima, en Córdoba
Otra de las estrategias adelantadas para el incremento de la financiación del sector, es mediante la reforma y la expedición de nuevas leyes, que garantizan a futuro la financiación de los programas más importantes sin que dependan de las asignaciones del presupuesto de la Nación. Este cambio de visión es fundamental para el largo plazo.
En el nivel territorial el sector cuenta con recursos provenientes, del Sistemas Generales de Participaciones y de Regalías, de la Estampilla Procultura, del Impuesto Nacional al Consumo de la telefonía móvil, de la contribución parafiscal por la ley de espectáculos públicos, entre otras fuentes, que han permitido el fortalecimiento de los procesos y proyectos culturales.
De otra parte, en estos seis años se aumentó del 3 al 6, el porcentaje que se transfiere para la cultura a las regiones, mediante el Sistema General de Participaciones, disposición que está contenida en los planes de desarrollo del actual gobierno.